¿Por qué el banco nos concede la hipoteca si a nosotros no nos salen los números?

La respuesta es fácil. Los números que nosotros hacemos para calcular nuestros gastos y los gastos de explotación de la farmacia no tienen por qué coincidir con los de la entidad bancaria.

Algunos ejemplos pueden ser la nómina que nosotros nos pongamos, el número de trabajadores o los gastos de la farmacia.

Pero siempre deben prevalecer nuestros números respecto a los del banco. Solo nosotros sabemos si queremos ganar 5000 euros al mes o podemos vivir con 1000 euros, y solo nosotros sabemos si estamos dispuestos a trabajar 12 horas al día o solo queremos trabajar 4 horas al día en la farmacia.

Pero para ello es fundamental que antes nosotros lo tengamos claro y perfectamente calculado, y seamos conscientes que la hipoteca y por tanto nuestras condiciones van a durar muchos años.

Y de nada sirve que engañemos al banco o a nosotros mismos porque al final solo significará que tendremos problemas, como ejemplo, pongamos un farmacéutico que entra en una operación conociendo que no tiene capacidad para contratar a ningún trabajador, es decir entrará en la farmacia a las 9 de la mañana y llegara a su casa a las 9 de la noche, y este farmacéutico tiene 2 niños pequeños, solo él conoce si tiene capacidad para mantener esta situación durante muchos años.

El banco al realizar su estudio de riesgos, solicita la documentación de la oficina de farmacia y una de la información adjunta indica que la farmacia se transmite libre de empleados y en el cálculo de viabilidad se indica que la farmacia va a ser trabajada exclusivamente por el titular.

Con estas condiciones calcula la viabilidad y concede la hipoteca.

Que el farmacéutico llegue a su casa a las 10 de la noche, que pueda o no pueda disfrutar de vacaciones o que pueda faltar al trabajo porque ha enfermado él o sus hijos, le resulta indiferente.